lunes, 28 de junio de 2010

Al pan, pan, y al vino, vino.



Ha llegado el final del curso y hay que hacer memoria.

El desarrollo de la programación y los resultados académicos de mis alumnos han estado determinados por su distribución en grupos.

Los alumnos del grupo A han tenido un rendimiento más que aceptable, mientras que en los grupos B y C, constituidos por alumnos repetidores o con dificultades, el fracaso ha sido generalizado.

En el grupo B ha existido una total falta de motivación hacia el aprendizaje de la asignatura. Ausencia de motivación que no depende de la voluntad o metodología del enseñante, sino que se debe, por un lado, a la legislación que permite a los repetidores la promoción automática al curso siguiente, y por otro, dentro del ámbito familiar, a la falta de cultura de estudio, de valoración de la educación y de disciplina familiar.



Es sobre la disciplina sobre lo que quiero escribir. Parece como si éste no fuera un tiempo para la disciplina, remedando aquello de que éste no es un tiempo para la poesía. Quizás el problema está en la palabra, que sugiere autoritarismo o castigos.

Etimológicamente, disciplina viene de discere, aprender, y el aprendizaje es algo que exige sacrificio, esfuerzo, rigor. El discípulo por sí mismo no está dispuesto a aprender algo impuesto y que la sociedad considera necesario. Si a un alumno le das a elegir entre entretenerse en el ordenador chateando con sus amigos o aprender el origen de la democracia y los fundamentos de la sociedad en que vive, sin duda elegirá lo primero. Si consideramos necesario que el alumno vaya a la escuela y que cumpla un currículo, entonces es necesaria la disciplina, es decir unas reglas cuyo cumplimiento es imprescindible y cuyo incumplimiento conllevará una consecuencia.

La escuela es una institución que tiene por objeto último integrar o acomodar al alumno a una sociedad determinada. Para esa inserción el Estado (el depositario del poder de esa sociedad) exige el cumplimiento de un currículo. Para conseguirlo el alumno tiene que estudiar. El Estado protege legalmente el derecho y el deber del alumno a aprender. Se ha de procurar por todos los medios que ese derecho no sea impedido y que ese deber se cumpla.

En el logro de ese derecho el papel del profesor es esencial. Es deber del profesor, funcionario del Estado, cumplir la legislación y ésta le obliga a cumplir con el derecho y el deber del alumno al estudio.

Por ello el profesor, representante del Estado, en definitiva, de la sociedad, que deposita en él la confianza para educar a los alumnos entregados a su cuidado, debe ser objeto del máximo respeto.

Para lograr ese objetivo de educar al alumno es necesario mantener una disciplina seria. A la escuela de hoy en día le sobra un exceso de coleguismo: coleguismo entre equipo directivo y profesores, entre equipo directivo y alumnos, y entre profesores y alumnos. Los límites de la relación entre los distintos sectores están definidos en la ley. No obstante, la laxitud en el seguimiento de las normas es general. Al final cada miembro define por sí mismo su marco de relación con el resto de grupos o individuos, de lo que resulta un no saber a qué atenerse.

A la escuela actual no le falta definir los limites de la relación profesorado alumno, le falta cumplirlos. La legislación extremeña relativa a los derechos y deberes del alumno establece como uno de sus primeros y principales principios el respeto máximo al profesor. Ese respeto no es temor sino consideración (re-spectare) hacia el enseñante y a la labor que realiza.

Ese respeto tiene que venir sobre todo del equipo directivo, de modo que, a priori, nunca se ponga en cuestión la actuación del profesor. Si éste no obrara conforme a las normas, hay procedimientos legales que se le deben aplicar, pero jamás debe ponerse en duda su profesionalidad. Porque al hacerlo ponemos en duda el propio sistema de la escuela.

En ésta hay tres niveles, cada uno de ellos con una función muy concreta: el equipo directivo que dirige, el profesorado que enseña y el alumnado que aprende. Por supuesto cada nivel podrá cuestionar al otro pero siempre a través de los cauces que establezca la ley, nunca de otro modo.

Al final todo se reduce a cumplir la ley, que en definitiva es la que marca los limites de nuestra libertad y la de los otros. Cumpliendo la ley respetamos a los demás y hacemos que los demás nos respeten.

domingo, 27 de junio de 2010

Doble vara de medir

Argentina va ganando a Méjico por dos a cero y pueden venir mas.
El primer gol ha sido en claro fuera de juego. Obviamente este gol va a ser determinante. Méjico se abrirá mas y Argentina puede marcar otros.
Esta tarde justificaba un gol anulado a Inglaterra alegando que si el arbitro lo pita no hay mas que hablar. En el caso de Argentina habría que seguir la misma conclusión y sin embargo parece que no es lo mismo cuando la injusticia se comete contra un fuerte que contra un débil.
Cuando Argentina gano a Inglaterra con un gol de Maradona metido con la mano nos alegramos y alabamos la astucia del jugador argentino. Era un gol injusto, pero como era contra Inglaterra no sentimos la injusticia, y hasta pensamos que le estuvo bien.
En fin lo siento por Méjico.

sábado, 26 de junio de 2010

Ah, but the strawberries!...


 

"Ah, but the strawberries! That's where I had them ..."

Captain Queeg, The Caine Mutiny




[caption id="attachment_456" align="alignleft" width="243" caption="Escaleras Leonor Plantagenet"][/caption]

 «Sólo el primer tramo de las escaleras podrá ser utilizado por los minusválidos»...   

Así subtitulaba el periódico Hoy digital la noticia sobre la proyectada escalera mecánica (del tipo de las usadas en cualquier metro urbano) sobre las actuales escaleras de la calle Leonor de Plantagenet, que unen la Avenida del Valle con la plaza de la Puerta del Sol presidida por la estatua ecuestre del fundador de Plasencia.    

La ciudad tiene problemas de aparcamiento. Primero se habla de convertir alguno de los colegios Alfonso VIII o Ramón y Cajal en un aparcamiento urbano y construir un gran colegio en las huertas de la Isla. Los propietarios de las huertas no conformes con el precio que el Ayuntamiento ofrece por sus terrenos impiden dicho proyecto. Mientras se soluciona la expropiación se decide utilizar una parte del espacio de las huertas para un aparcamiento al aire libre.    

El problema que surge ahora es como facilitar el acceso desde este aparcamiento situado en el extrarradio hasta la ciudad. La solución no es otra que construir una gigantesca escalera mecánica sobre las actuales escaleras de la calle Leonor de Plantagenet.      

La proyectada escalera mecánica ha levantado polémica entre los comerciantes de la calle Plantagenet y algunos vecinos. Ademas la escalera mecánica no podrá ser utilizada en todo su recorrido por los minusválidos por lo que estos también reclaman.    

Las críticas también se dirigen al excesivo coste, no sólo en el funcionamiento sino sobre todo en su mantenimiento, ya que dada la escasa conciencia cívica en el cuidado de los equipamientos públicos, se espera que se vean afectadas por actos de vandalismo.    

Desde luego, sabiendo el grado de endeudamiento que tiene el Ayuntamiento y la situación de crisis en la que vivimos, es obsceno que se planteen estas extravagancias que van a tener un uso muy limitado.    

Tampoco se tienen en cuenta aspectos estéticos: la escalera mecánica impediría totalmente la ya difícil vista del fondo de murallas que se advierte desde la Avenida del Valle en la Plaza del Sol. Desde luego el artilugio tampoco favorece las advertencias del Ministerio y de la Consejería de Sanidad de la Junta en favor del ejercicio físico.   

El Ayuntamiento se reafirma en que las obras empezarían después de Ferias de comienzos de junio. Los oponentes por su parte anuncian su intención de llevar el problema ante la justicia.   

Como se había prometido las obras de la escalera empezaron el lunes 21 de junio pero el jueves habían sido detenidas: un particular había puesto una denuncia en el Juzgado n 2 de Caceres.    

La versión del Ayuntamiento es que es una decisión provisional. El lunes 28 de junio los técnicos del Ayuntamiento defenderán ante el juez la legalidad de la instalación.   

La alcaldesa habla de conspiración política.   

Sus palabras me recuerdan aquellas del capitán del Caine, Queeg, a quien sus oficiales se le amotinan, y cuando estos son juzgados en consejo de guerra, el capitán Queeg, declarando como testigo, dice, mientras juega con unas bolas metálicas en la mano derecha, que todo es culpa del robo de las fresas... Es decir, todo es culpa, no de su propia ineptitud, orgullo, vanidad, etc.,  sino de las fresas.    


Nota: la foto está tomada casi al final de las escaleras y en ella aparece un individuo que porta una cartera de trabajo, abstraído del hecho de ser fotografiado.



lunes, 21 de junio de 2010

Cinco días de junio...

Un breve resumen de la visita a las catedrales góticas de Chartres y Amiens y a la Capilla Palatina de Aquisgrán entre los días 10 y 15 de junio.

Pincha en Cinco días de junio

Sepulcros blanqueados...

En aquellos días, dijo Jesús: «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, pues sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera parecen bonitos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia! Así también vosotros, por fuera aparecéis justos ante los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía y de iniquidad.
Mateo 23, 27-32


L'Osservatore Romano, periódico oficial del Vaticano ha publicado un artículo sobre José Saramago, que, sin entrar en si tiene o no razón, no lo encuentro muy cristiano.

El articulista, Claudio Toscani, defiende en él la idea de un Dios misericordioso, al contrario que Saramago, quien, según aquél, en el Vangelo secondo Gesù, Dios Padre "sovrintende l'universo con potestà senza misericordia." Pero de un modo totalmente anticristiano el articulista decide colocar a Saramago en la zizaña de la que habla Jesús cuando al hacer la cosecha del Juicio Final, Dios separe el grano de la zizaña. Literalmente el artículo dice que Saramago se coloca lúcidamente "dalla parte della zizzania nell'evangelico campo di grano".

Y yo como cristiano y católico me pregunto, ¿cómo es posible que la Iglesia, una madre, se otorgue la capacidad de decidir el destino eterno de un ser humano, un hijo suyo, y colocarlo en el infierno, cuando al mismo tiempo proclama la infinita misericordia (compasión desde el corazón) de Dios?

domingo, 20 de junio de 2010

Queridos lectores...

En la etiqueta de Páginas podéis visitar una nueva entrada titulada Cinco días en junio. Espero que os guste.

Sepulcros blanqueados...

En aquellos días, dijo Jesús: «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, pues sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera parecen bonitos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia!  Así también vosotros, por fuera aparecéis justos ante los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía y de iniquidad.
Mateo 23, 27-32

José Saramago ha muerto.

L'Osservatore Romano, periódico oficial del Vaticano ha publicado un artículo sobre José Saramago, que, sin entrar en si tiene o no razón, no lo encuentro muy cristiano.

El articulista, Claudio Toscani, defiende en él la idea de un Dios misericordioso, al contrario que Saramago, quien, según aquél, en el Vangelo secondo Gesù, Dios Padre "sovrintende l'universo con potestà senza misericordia." Pero de un modo totalmente anticristiano el articulista decide colocar a Saramago en la zizaña de la que habla Jesús cuando al hacer la cosecha del Juicio Final, Dios separe el grano de la zizaña. Literalmente el artículo dice que Saramago se coloca lúcidamente "dalla parte della zizzania nell'evangelico campo di grano".

Y yo como cristiano y católico me pregunto, ¿cómo es posible que la Iglesia, una madre, se otorgue la capacidad de decidir el destino eterno de un ser humano, un hijo suyo, y colocarlo en el infierno, cuando al mismo tiempo proclama la infinita misericordia (compasión desde el corazón) de Dios?

sábado, 19 de junio de 2010

Fieles lectores...

He abierto un nuevo blog en blogger como un suplemento de éste para añadir otros elementos que aquí no caben. Esta es la dirección

El Conde de Peña Ramiro

El Conde de Peña Ramiro

Me preguntaréis, fieles lectores, por qué he cambiado de servidor para este nuevo blog. He aquí la explicación:

El blog en wordpress había nacido de una obligación para cumplir el requisito de un curso sobre blogs que hice en invierno. Además últimamente estaba teniendo problemas porque no podía introducir música si no era pagando. Así que me decidí hacer un nuevo blog.

No pude mantener el nombre porque Tácito en Plasencia también se llama el blog que tengo con mis alumnos. Decidí ponerle el nombre de El Conde de Peña Ramiro porque estoy leyendo el Conde de Montecristo y me está encantando. Peña Ramiro es el nombre del castillo de Truchas, el pueblo de mi madre. Creo que esas son dos buenas razones para nombrar este nuevo blog.

Quiero continuar colocando en él "mis reflexiones" como medio de desahogarme y quién sabe llegado el caso concienciar. Voy a iniciar una nueva categoría que titularé "mis impresiones" en la que pretendo reflejar en pinceladas los viajes que hago con Jennifer. Tengo alguna otra novedad que aún estoy madurando.

jueves, 17 de junio de 2010

Música de fondo

[audio http://www.goear.com/listen/669ef33/lascia-chio-pianga-maria-callas]

miércoles, 16 de junio de 2010

Mira que eres primo, qué primo que eres...

El avión tenía prevista su salida a las 10:05. Teníamos que estar en el aeropuerto una hora y media antes, a las 8:30. El tren hasta el aeropuerto tardaba una media hora. Lo cogeríamos a las 8:00. Calculamos que si desayunábamos a las 7 nos daba tiempo de sobra. Así que pusimos el despertador para las 6:30. Todo fue según lo previsto. Cuando llegamos al aeropuerto tuvimos que darnos prisa porque la terminal estaba bastante lejos, unos diez minutos. Al fin pasamos seguridad y nos sentamos a esperar. No había pasado media hora cuando vimos que la gente se levantaba y se colocaba en la cola para embarcar. Aunque en el tablero de anuncios decía que el avión saldría a las 10:30 y aún faltaba casi una hora nosotros nos colocamos en la cola: si entrábamos antes tendríamos más sitio para colocar nuestro equipaje y saldríamos más pronto.

Poco a poco iba llegando la gente. Algunas personas, viendo la cola que se había formado, o bien se sentaban o bien se colocaban al final. Pero otros, incluso habiendo llegado justo a punto de embarcar, con toda la cara del mundo se disponían estratégicamente jugando al despiste junto a los que ya estaban en cola. Una señora que estaba delante de nosotros le hacía señas a su acompañante sobre alguien que se les había colado. Pero ni ella ni nadie decía nada. Tampoco nosotros. Eso sí, entre nosotros no faltaban los comentarios de "¡Desde luego, vaya cara! ¡Y para esto nos levantamos a las seis y media y nos preocupamos de llegar a la hora!¡Esto es la leche! ¡Y nada, y ellos se quedan tan anchos!"

¿Y qué haces en estas ocasiones? ¿Los pones en evidencia? Seguramente tu repuesta es la lógica: "¡Pues claro!"

Pues no está tan claro. Yo creo que eso depende de cuáles sean las consecuencias: si cantarles las cuarenta te va a poner a ti de mala leche, porque te van a contestar con un "¿Y?", y tú, pensando que ellos tenían el sentido del respeto y la consideración que tú suponías en todo ser humano te vas a quedar mudo sin saber qué responder, pues entonces lo mejor es no decir nada y seguir siendo el primo que eras.

"Quem me dera" tener la cara dura para cantarles las cuarenta y quedarme más pancho y tranquilo que nunca. Pero no, yo sé que me voy a poner de mala sangre y me aguanto y, remedando la canción aquella de Antonio Machín "Mira que eres linda, qué preciosa eres...", me digo "Desde luego, mira que eres primo, qué primo que eres..."

Es obvio que ese mundo de respeto y consideración al prójimo, de cumplimiento de mínimas normas sociales de sentido común, ese mundo en el que todos nos debiéramos mover no existe. Entonces sólo te quedan dos opciones: la solución de Michael Douglas en aquel papel de empleado de camisa blanca que se dirige a su casa y que harto de aguantar se pone a dar tiros a diestro y siniestro, o la del primo y pringao que aguanta que le pisen y le repisen.

Aunque en este último caso, no sé hasta cuándo puede uno aguantar...

martes, 8 de junio de 2010

Problema de país

Problema de país: estamos endeudados hasta las cejas. Causa: gastamos más de lo que ingresamos. Diagnóstico: el gobierno no ha sabido administrar bien. Solución: reducir gastos. ¿Cuáles? El gobierno ha decidido recortar en torno a un 5% el sueldo de los funcionarios y congelar las pensiones.

Como funcionario, tengo la impresión de que poco o nada le va a importar a nadie que a los funcionarios nos recorten el sueldo. El silogismo funciona: los funcionarios son unos zánganos; somos funcionarios; por lo tanto somos zánganos, o mejor, sanguijuelas chupando la sangre de los trabajadores de verdad, de los de sol a sol, de los de pico y pala. Si además de funcionario soy profesor, peor, porque tengo unas vacaciones que ya quisieran otros. De todo lo cual se deduce: mejor no te quejes.

Cuando vi en los períodicos extremeños campañas para dignificar la figura del profesor me dije, ¡hombre, ya era hora! Parece que esas campañas sólo eran para mejorar la imagen, no el bolsillo. Habrá que dejar la dignificación del profesor para mejor ocasión. ¿Dentro de cincuenta años? Puede, aunque yo creo que también entonces la imagen del funcionario vago continuará en la imagen de la ciudadanía. Porque en verdad ¿qué somos realmente? ¿Maestros o guardas?

El PSOE hace sus cálculos. Digamos que los votantes funcionarios se reparten al cincuenta por ciento entre los dos partidos. Cuando llegue la hora de votar, no todos los votantes del PSOE cambiarán, habrá algunos a quienes les duela dejar su partido de siempre. Por tanto supongamos que pierde la mitad de ese cincuenta por ciento, aún le queda el 25% del funcionariado.

Congelar las pensiones, pero ¿cuáles? no las más bajas porque esas son votos de izquierda. Las medias y altas, esas, al igual que los funcionarios se dividen entre los dos partidos. Por tanto otro 25% menos.

¿Qué sector queda que hay que proteger y cuidar para futuras elecciones? El parado. Un veinte por ciento es mucho. Si se mantienen las subvenciones es previsible que buena parte de ese voto, agradecido, se mantenga.

Al final todo es cuestión de números. Funcionarios y pensionistas somos desechables como votantes. Para un partido en el gobierno peor sería perder los votos cautivos de puestos de libre designación o muñidores de estudios y proyectos que nada estudian o proyectan.

El PP, la derecha, por su parte se ha convertido de la noche a la mañana en defensora de los trabajadores. Lo que hay que ver.

¡Qué le vamos a hacer!

No ¡Vamos a hacer!

Lo único que nos resta es la dignidad. Aunque los propios que nos tenían que defender (al menos en consecuencia con su ideología) nos quiten parte del valor (plusvalía) de nuestro trabajo para pagar las deudas y los intereses al capital (Qué ironía), no perdamos nuestra dignidad.

Como decía en la anterior entrada:
Don't sit there dying the way they want you to die.

Don't sit there dying the way they want you to die.


 "... Clay. Clay, you got to break out. Don't sit there dying the way they want you to die. Get up." 

 

Dutchman, Scene II. Amiri Baraka 

 Esta obra de teatro representa la lucha de un joven negro por liberarse de la sumisión al sistema impuesto por los blancos, sistema representado por Lula o la Eva que lo tienta. 

En un momento de la obra, el de la cita del comienzo, Lula le increpa y le hace ver cuál es su verdadera situación: Clay, sometiéndose al sistema, se está muriendo del modo que ellos quieren que muera. 

¿Acaso los alumnos abandonados y fracasados en muchas aulas de nuestras escuelas no son Clays que "mueren" a causa de unas circunstancias que les impiden liberarse a través de la cultura? 

Me duele ver a alumnos sentados frente a mí sin ningún deseo de educarse. Vienen a clase porque están obligados a ello. Esto es así y ha sido siempre así. La educación (educación como conducción) hasta la puerta de la escuela funciona porque es coercitiva: los padres están obligados por ley a llevarlos a la escuela. El problema surge dentro de la escuela. La coerción para aprender no puede hoy ejercerse sino es por el convencimiento, la emulación y por el deseo del propio aprendiz.     

En muchos casos hoy el maestro se siente como el vendedor de una mercancía que para él es básica y necesaria pero que los alumnos no desean. Al final son los maestros quienes se transforman en compradores de un poco de esfuerzo y de aprendizaje de sus alumnos a base de contratos o, por qué no decirlo, de sobornos.     




[caption id="attachment_301" align="aligncenter" width="120" caption="Hypatia de Alejandría"][/caption]

Uno se encuentra premiando a alumnos que hacen lo que es su obligación y no reservando el premio para el esfuerzo añadido y extraordinario. 

Pero la culpa no es de ellos.      

Porque, ¿qué estima tiene la sociedad por el esfuerzo, el trabajo o incluso por el honor?        

El ejemplo para nuestros jóvenes no son los San Jorges o las Hypatias de otros tiempos.          

[caption id="attachment_304" align="aligncenter" width="300" caption="San Jorge y el dragón, Paolo Uccello, c. 1470."][/caption]

Este es un problema de toda la sociedad, toda, incluyendo los medios de comunicación.  

Todos deben trabajar en la misma dirección. No podemos esperar que los maestros sean los únicos que instilen gota a gota en las frescas mentes de los alumnos la gloriosa experiencia de la cultura.        

A lo mejor es que algunos ya estamos fuera de onda y no nos hemos dado cuenta de que la decencia (decere: ser apropiado) es algo pasado de moda.